La organización de un evento, sin importar cuál sea, consume mucho tiempo y esfuerzo. Por eso, es común que nos resulte difícil atender todos los detalles pertinentes, como la selección del fotógrafo que cubrirá el evento. Sin embargo, es importante dedicar suficiente tiempo a este asunto porque será este profesional quien se encargue de plasmar los momentos especiales de la ocasión. Ahora bien, ¿qué debes tener en cuenta antes de contratar?
Fotografía profesional adecuada a la ocasión.
En primer lugar, verifica que el fotógrafo tenga la experiencia y habilidad necesaria para realizar el trabajo. La recomendación habitual es que desconfies de todos los que acepten el trabajo sin asegurarse qué tipo de fotografía se requiere. Ten en cuenta que no es igual fotografiar modelos en un estudio o en un lugar de fiestas. Esto es así porque en el estudio se pueden manipular varios aspectos, como la iluminación y la postura de los modelos. Sin embargo, en una fiesta normalmente no se puede controlar la cantidad de luz disponible, lo que incluye las tonalidades.
¿Cómo puedes saber si el fotógrafo en cuestión realmente tiene las habilidades necesarias? Pues bien, para darte una idea del tipo de trabajo que realiza es recomendable que revises su portafolio de trabajos anteriores. Céntrate en las fotografías tomadas en penumbra o a contra luz. También observa las fotos en movimiento, como aquellas en que se ven niños corriendo o personas bailando. ¿Son de calidad o solo aceptables? Recuerda que en el portafolio de trabajos únicamente se incluyen los mejores trabajos, por lo que no podrías esperar que el resultado de tu evento supere lo que te muestran.
Todos estos aspectos se relacionan principalmente con el tipo de equipo de fotografía. Sin embargo, también es importante revisar su habilidad para capturar el momento, como veremos a continuación.
Fotografía de calidad.
Aunque con la expresión «fotografía de calidad» podríamos pensar en equipo sofisticado, en este punto nos centraremos en otro punto: capturar el momento. Algunas fotos deben tomarse de forma casi imperceptible, prácticamente sin que se den cuenta los invitados. Pero en otros caso, debe ser evidente para ellos que los fotografiarán para que «posen» para la foto. Ahí estriba la diferencia.
Para entender este punto, pensemos en un fotógrafo que sencillamente se limita a tomar las fotos sin darle ninguna sugerencia a los invitados. Ahora pensemos en otro que corrige pequeñas cosas que hace la diferencia. Tal vez se asegure que la corbata este derecha o que la mesa luzca lo más presentable posible. Por supuesto, el trabajo del segundo fotógrafo será mejor, más atractivo. Eso nos ayuda a entender por qué es importante revisar sus habilidades antes de contratar.
Por último, por mucha iniciativa que tenga, se espera que el fotógrafo sepa sujetarse estrictamente a las indicaciones que se le den. Esto es de suma importancia porque quizá lo que para él sea importante no lo sea para ti. Por eso, se espera que capture especialmente escenas memorables para ti. Aunque es una tarea ardua, vale la pena dedicar suficiente tiempo a seleccionarlo.